top of page
Buscar

UNA VIDA CRISTIANA DE DECIDIDA EVOLUCIÓN

Lunes 25 de Marzo / 2019


Romanos 12: 1-2

“Una vida de verdadera comunión con Dios, produce cambios continuos”

Cuando somos nacidos de nuevo y tomamos la decisión de recibir y seguir a Cristo, se debe obrar una transformación en nosotros (2 Corintios 5:17).


Esto requiere de nuestra parte un real compromiso con Dios (sacrificio), que incluye una relación íntima con Él y un trato correcto con nuestro prójimo; los dos deben reflejarse en nuestro diario proceder, para agradar al Padre.


El creyente debe adoptar una forma de vivir distinta, que sea contraria a la que vive el mundo. Jesús oró: “No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal” (Juan 17:15). También expresó que no somos de este mundo, entonces, aunque vivimos en esta tierra, no debemos hacer lo que hace el mundo, no podemos consentir y mantener las prácticas del sistema mundano (la sociedad sin Dios), sino ser nuevos hombres en Jesucristo.


Esto implica que el creyente sea un ser de impacto en la sociedad, pues el reino de las tinieblas y el Reino de Dios son opuestos. Entonces se debe notar que somos hijos de Dios.

¿Por dónde empezar, entonces?

  • Evalúe su vida cristiana – Entrega total a Dios

  • ¿Cómo cree que su familia y vecinos lo definen respecto a su fe?

  • Con total sinceridad, enumere las áreas de su vida que aún permanecen conforme al sistema del mundo. Empiece a trabajar en cada una de ellas, una a la vez, con la ayuda del Espíritu Santo, para mejorar su condición.

  • ¿Qué indica que usted se ha entregado a Dios?

  • ¿Cuál es la demostración de que la buena, agradable y perfecta voluntad de Dios, está en su vida?

Sólo usted y Dios conocen la verdad. No se alarme por las repuestas, encamínese en dirección al Padre y asegúrese de que su vida se caracterice por una trasformación espiritual que evolucione constantemente.

7 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page